FANFICTION ..CAP. 4 , 5 Y 6 !!! :)

BUENO AQUI COMIENZO CON EL NUEVO FIC Q ES APARTE DEL FIC DE MI AMIGO ERALD...ESPERO Q SIGAN LEYENDO EL D EL ....BUANO LA GENIA Q ESCRIBIO ESTE FIC OVIAMENTE NO SOY YO SE LLAMA :
"Tsuyu ryu "

ASI APARECE EN EL FORO...BUENO ELLA MERECE TOODOS LO MERITOS,,, BUENO Y ACLARO COMO SIEMPRE Q MI INTENCION NO ES ACER Q CREAN Q EL FIC ES MIO..NOOO PARA NADA ..SOLO QIERO Q LEAN ESTOS MARAVILLOSOS FICS Q ME VOY ENCONTRANDO Y Q RECONOSCAN EL TRABAJO DE LA ESCRITORA...TAMBIEN ACLARO Q LA AUTORA NO ME AUTORIZO..PERO ALMENOS NUNCA HE TENIDO PROBLEMAS CON LOS OTROS FIC Q HE SUBIDO..PORQ LO HAGO CON EL RESPETO Q SE MERECEN LAS ESCRITORAS DE ESTOS FICS...TAMBIEN LES DIGO Q ETSE FIC TIENE SU SECUELA..Y LES DIGO Q LES VA A ENCANTAR ..PORQ DESPUES ESTO SE PONE MUY TRISTE Y INTERESANTE....GRACIAS Y ESPERO SU APOYO..:)
vAniiah

CAP. 4 :

“Problemas alimenticios”

EPOV

El dolor era algo que definitivamente no había extrañado en mi ‘vida’.

Ahora que Bella estaba abajo con Charlie, desayunando, podía permitirme sentirlo. No quería que Bella me viera sufrir, eso la preocuparía. Yo mismo estaba preocupado y asustado también, pero ella nunca lo sabría. Mi costado y mi pierna dolían mucho, y tenía que hacer un gran esfuerzo para no dejarle ver cómo me sentía en realidad. Ninguno de nosotros había sido herido antes (a excepción de Jasper, pero sus recuerdos no ofrecían mucho alivio). Quisiera que Carlisle estuviera aquí… por cierto, ¿porqué no estaban aquí? Seguramente Alice me habría visto herido, así que ¿por qué no habían vuelto? Quizás ella no había visto nada, considerando que el atacante –my atacante… sonaba tan extraño- era un hombre lobo. Pero, ¿significaba eso que aún existía una conexión entre los dos? ¿Nuestros futuros estaban aún tan unidos que ella no podía ver?

Ese pensamiento me devolvió mis dudas sobre el lobo. Los comentarios que Bella hizo anoche me hicieron notar que no podía ser un miembro de la manada Quileute (se apegaban estrictamente al tratado). Así que, ¿quién era? ¿Por qué había venido a Forks? Parecía bastante experimentado, y mucho más astuto que Jacob y sus compañeros, así que debía haber vivido mucho… Me pregunté si la manada de Sam lo encontraría, y lo que harían cuando lo hicieran. ¿Recibirlo como a uno de los suyos? ¿Ignorarlo? ¿Ayudarlo? Dejé de pensar en ello, frustrado; era muy molesto no saber.

Quizás podría salir a cazar. Después de todo, lo necesitaba para sentirme mejor. Pero otra parte de mi mente –la que sentía el dolor, supongo- se oponía a ello… además, ¿qué pasaría si el lobo me rastreaba? Podría descubrir donde había estado, quizás decidiría atacar a Bella… no, esperaría hasta saber más antes de salir de nuevo. De pronto, la inusualmente sonora mente de Charlie interrumpió mi meditación. Estaba pensando en ser más amable conmigo, por el bien de Bella… interesante; jamás creí que decidiría luchar contra su desagrado hacia mí algún día –después de todo, me lo merecía, en más formas de las que pudiera imaginar-. Estaba preocupado de que yo no tuviera hambre… un momento, no me gustó el curso que tomó su mente. Vaya. Esto iba a ser desagradable. Muy desagradable.

BPOV

Observé a mi papá con una mezcla de mal humor y diversión. Edward tenía razón; había ido a vigilarnos al menos 5 veces durante la noche, y se sentía evidentemente aliviado cada vez que me veía en la bolsa de dormir cerca de mi cama, donde Edward fingía dormir. Si supiera que, después de cada visita, regresaba a mi cama y al abrazo de Edward… el recuerdo de su cuerpo yaciendo junto a mi, de sus manos que me tocaban mientras dormía, o su suave voz cuando me cantaba mi canción… debería dejar de pensar en eso o probablemente terminaría haciendo exactamente lo que Charlie temía. Se pondría como loco.

“¿No va a bajar?” preguntó Charlie. ¿Ahora estaba preocupado por Edward? Debí haberle dado más crédito; después de todo, era un buen hombre.

“No… um… dijo que no tenía hambre” dije con rapidez. Si supiera qué era exactamente lo que Edward necesitaba comer…

Charlie enarcó una ceja. “Debiste haberlo obligado… necesita comer para recuperarse” dijo. Tuve que ocultar una risita; la idea de que yo obligara a Edward a hacer algo era simplemente divertida.

“Está bien, papá. Comerá más tarde” dije, pero la mirada de Charlie era extraña. ¿Convicción? ¿Determinación?

“¿Eso era para él?” preguntó señalando la charola que yo había colocado sobre la mesa. Solo tenía un plato de cereal y algo de pan tostado.

“Err… si” mentí. De hecho, era para mí. Había planeado subir con ella y pretender que él se la comía, mientras que realmente iba a hacerlo yo… después se me ocurrió decir que no estaba hambriento, pero había olvidado ocultar la charola.

“Quizás yo debería obligarlo, ya que tú no tienes el valor para hacerlo. Necesita comer” dijo mi padre. Traté de mantener una sonrisa en mi rostro, pero dudaba que estuviera teniendo éxito. Aún recordaba la forma en que Edward había mirado mi desayuno hace algún tiempo… pero antes de que pudiera decir algo mi papá se levanto y, con la charola en las manos, se dirigió hacia mi habitación.

No me sorprendió encontrar a Edward recostado en la cama, fingiendo estar enfermo. Debió haber escuchado los pensamientos de mi padre, pues su rostro tenía una leve expresión de asco.

“Bella me dijo que no quieres comer” Charlie dijo, tratando de sonar más amigable. Estaba sorprendida.

“No se preocupe, Charlie. Comeré más tarde” le dijo Edward, pero mi papá era casi tan terco como él.

“¡Vamos! Necesitas comer” dijo Charlie, colocando la charola sobre las piernas de Edward. Si, definitivamente era tan terco como él. La forma en que Edward miraba a mi papá era extraña; parecía conmovido por el gesto, a pesar del problema… así que mi papá realmente estaba tratando de ser más amable. Me conmoví también, pues sabía que lo estaba intentado solo por mí… pero no pude evitar sentir pena por Edward; si tan solo Charlie supiera lo que le estaba pidiendo a mi pobre vampiro…

Edward suspiró, fingió un ataque de tos, y sujetó la cuchara. Charlie lo miraba atentamente; estaba determinado a verlo comer algo. Edward me miró y, valientemente, comenzó a ‘comerse’ el cereal.

“No fue tan malo, ¿verdad?” preguntó mi papá. Si supiera… pero Edward se limitó a sonreírle educadamente.

“Asegúrate de que se lo coma todo, Bella. Tengo que irme” dijo Charlie, y se retiró después de que yo asentí, incapaz de decir algo.

Una vez que se fue, Edward hizo un gesto de asco y alejó la charola tanto como pudo.

“Lo siento” dije.

“Esta bien, Bella. No podía rehusarme; después de todo, estaba preocupado por mi salud… me hubiera sentido mal de no aceptar el gesto, especialmente considerando que no le caigo muy bien” dijo él, pero su rostro aún mostraba desagrado.

Así que por eso se había conmovido. “Al menos nunca dudará que eres humano” dije. Se río, pero se detuvo bruscamente y cerró los ojos.

“¿Aún te duele?” le pregunté, preocupada.

“No mucho” respondió. Mentiroso. ¿Por qué siempre tiene que protegerme?

“Escucha, quisiera ir a La Push. Quizás Sam o Seth saben algo sobre el hombre lobo, y quiero preguntarles. ¿Vas a estar bien?” le dije.

“Bella, soy más fuerte que cualquier ser humano. Por supuesto que estaré bien… solo ten cuidado” dijo. Era obvio que la idea de que yo visitara La Push lo ponía ansioso, pero al menos ahora confiaba lo suficiente en ellos –especialmente por su amistad con Seth- para permitirme ir.

De repente, Edward sujetó mi muñeca y me atrajo hacia él. Me besó intensamente… su perfume llenó mi nariz, y sentí la suavidad de su boca en la mía. Toqué su piel helada, disfrutando la sensación. Lo olvidé todo excepto a él; no deseaba nada más que quedarme ahí para siempre… De nuevo, olvidé respirar, y estaba algo mareada cuando se detuvo.

“No tardes mucho…” dijo él, con un tono tan seductor que casi que hizo olvidar mi propósito y quedarme con él. Pero tenía que ir; si había alguien que pudiera saber algo sobre el misterioso cazador, esa era la tribu Quileute.

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CAP. 5 :

“Problemas”

BPOV

Cuando llegué a La Push, sentí la habitual tristeza. No podía evitar sentirme culpable cuando pensaba en Jacob. No me arrepentía de mi elección, pero me sentía mal al saber que lo estaba lastimando más de lo que merecía… desearía que, algún día, Jake encontrara alguien a quien amar…

No me di cuenta de que estaba ya fuera de mi auto hasta que oí una voz familiar que me saludaba.

“¡Hola, Bella!” dijo Seth, animado. Que suerte, exactamente el chico que estaba buscando.

“Oh, hola Seth” dije, todavía pensando en Jacob.

“Jacob no ha llamado todavía, lo siento… ¿Pero como está Edward?” preguntó Seth. Se sentía tan bien escucharlo hablar de Edward tan a la ligera, como verdaderos amigos… ¿Por qué no podía el resto actuar así? Un segundo… ¿Por qué la pregunta? ¿Acaso sabía…?

Debió haber adivinado mi confusión. “¡Oh! Charlie estuvo aquí esta mañana. Le dijo a Billy que Edward estaba…hum… ‘enfermo’ y que se estaba quedando en tu casa. Por supuesto, Billy le dijo a Sam, y todos lo supimos” dijo Seth. Así que lo sabía… Por un momento, me pregunté lo que los chicos pensarían de mí. ¿Traidora?

“¿Podemos hablar en otra parte?” pregunté. No es que no confiara en los chicos, pero en este momento no deseaba hablar frente a alguien que pensara en Edward como un monstruo… así que Seth era la única opción. Él asintió, y ambos caminamos hacia la playa.

Una vez que me aseguré de que estábamos solos, estaba lista para empezar. No esperaba que Seth lo hiciera primero.

“Así que… ¿Cómo está Edward? ¿Esta bien?” preguntó Seth, serio.

“Bueno, no realmente. Fue atacado por un hombre lobo… está herido” dije, tratando de sonar calmada a pesar de mis sentimientos al respecto. Seth suspiró. “¿Entonces lo sabías?” pregunté, sorprendida de nuevo.

“No exactamente. Sam encontró un lobo solitario ayer… se rehusó a venir a La Push, pero dijo que fue atacado por un vampiro. Obviamente, Sam esta molesto” dijo Seth. Era peor de lo que esperaba; si Sam creía que Edward había comenzado una pelea, ¿rompería el tratado? ¿Iniciaría una guerra?

“¿Entonces no es uno de los suyos?” pregunté.

“No. Estamos muy confundidos. Creíamos que éramos los únicos capaces de transformarnos, y luego llega este tipo y nos demuestra lo contrario…” respondió Seth, frustrado.

“¿Sam ha dicho algo al respecto?”

“Si. Sam habló con él esta mañana, cuando le ofreció algo de comer” Seth se detuvo.

“¿No te permite decírmelo?” pregunté.

“No, no es eso… no lo ha prohibido –aún- pero no sé… tal vez se enoje conmigo” dijo Seth. Esperé mientras tomaba una decisión; no sabía si su amistad con Edward era tan fuerte. Seth suspiró.

“Bien, voy a decirte, pero promete que no se lo dirás a Sam ¿de acuerdo?” preguntó. Yo asentí; dudaba que Sam quisiera hablar conmigo ahora.

“Bueno, dijo que su nombre era Alphonse, y solo añadió que el vampiro lo atacó en el bosque… lo dijo dando a entender que el vampiro atacó sin razón alguna. Sam esta indeciso; cree que eso significa que rompieron el tratado y que deberíamos atacar. La mayoría está de acuerdo. Honestamente, yo no estoy seguro. Digo, no lo conocemos, y los Cullen no han roto la paz en todo este tiempo, ¿Por qué ahora?” dijo Seth.

No pude responder. Como temía, el odio de Sam hacia los vampiros estaba a punto de causar problemas. Pero mi miedo se mezclaba con furia hacia el extraño cazador que ni siquiera conocía… ¡Estaba tratando de manipular a Sam para lastimar a Edward! Estaba furiosa; ¡Edward nunca atacaría a alguien sin provocación! ¿Cómo podía Sam creerlo tan fácilmente?

“Escucha, Bella. Esto es serio. Si Sam decide atacar, no habrá nada que podamos hacer para evitarlo. Dime la versión de Edward, Bella. ¿Realmente atacó primero?” preguntó Seth. Parecía preocupado no solo por sus amigos, sino también por Edward –eso todavía era extraño… un vampiro y un hombre lobo como amigos-.

Le conté todo lo que Edward me había dicho anoche; cómo se había lastimado y porque había herido al cazador. Seth escuchó en silencio, pero no supe lo que pensaba; por un momento, deseé tener el don de Edward. Me miró cuando terminé.

“Te creo” dijo, “En realidad, encaja. El hombre evita cualquier intento de obtener detalles sobre lo que pasó, y ciertamente parece deseoso de atacar” concluyó Seth, más para sí mismo que para mí.

“¿Crees que esté siguiendo a Edward?” pregunté.

“Eso parece. No sabe su nombre, pero le dio a Sam una descripción exacta de él… parece algo obsesionado.” Dijo él. ¿Obsesionado? ¿Por qué estaba tan determinado a matar –temblé ante la palabra- a Edward? Él no había hecho nada.

“Edward está en tu casa, ¿cierto?” asentí. “Creo que debe quedarse ahí por el momento. Como dije, Sam aún no ha dado ninguna orden, pero está vigilando el bosque… y esta molesto. Realmente cree que Edward no debió herir al cazador, sin importar las circunstancias. Pero no puede hacerle nada si está contigo” dijo Seth. Eso ya lo sabía; Sam no querría lastimar a Jacob, aún si no estaba aquí.

“Trataré de decirle a Sam lo que sucedió según Edward. Espero que sospeche lo suficiente como para esperar hasta descubrir más. Lo siento, es todo lo que puedo hacer” dijo. Vi claramente en su rostro que no deseaba una guerra; no después de haber luchado al lado de los Cullen y descubrir que no eran tan malos como creía.

“Gracias, Seth… por todo” dije, conmovida. “Tengo que irme… quiero ver como sigue Edward. Nos vemos luego, ¿de acuerdo?”

“Si. Saluda a Edward de mi parte… espero que se mejore” dijo Seth.

“Lo hare Quizás puedas ir a visitarlo” lo invité. Sabia que probablemente no podría hacerlo, pero me sonrió como si la idea le agradara.

“Tal vez” dijo.

Una vez que estuve en mi auto, me pregunté porque el resto de ellos no podía ser tan abierto. Sam, Embry, Jacob… ¿Por qué no podían hacer a un lado sus prejuicios y ser amigos? Suspiré; supongo que debe ser difícil luchar contra los instintos, ¿pero no era eso exactamente lo que había hecho Edward? ¿Luchar contra su sed y sus instintos para estar conmigo? Quizás, algún día, ellos lo harían también.

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El cazador suspiró. Al menos el esfuerzo para moverse había valido la pena. Había visto a la chica, la había escuchado hablar con ese chico sobre un vampiro… un vampiro herido. Debía ser el que estaba buscando. ¿Cuál era su nombre? ¿Bella? Si, ése era. A pesar de su frustración –aún estaba demasiado herido como para intentar seguirla- podía sentir que su venganza estaba cerca. Podría reconocer su olor, rastrearla, y entonces… todo terminaría para ellos.

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CAP . 6:

“Error”

EPOV

Estaba aburrido. MUY aburrido.

Normalmente, estaría corriendo afuera, o tocando el piano, o cazando… pero como le había prometido a Bella quedarme –y el dolor le daba la razón en ello- no tenía nada que hacer. Además, aún estaba preocupado por el cazador. Lo poco de su mente que pude leer estaba lleno de odio hacia mí… eso era comprensible, pero también había un deseo de venganza. ¿Qué le había hecho yo? Ni siquiera lo conocía.

Necesitaba cazar. Podía sentir como me debilitaba… lo que significaba que mis heridas no estaban mejorando; de hecho, dolían demasiado. Y Bella aún no había llegado… estaba empezando a preocuparme; quizás debí haber ido con ella. De acuerdo, necesitaba una distracción, urgentemente… tal vez debería intentar ver la tv; su sonido podría distraerme lo suficiente.

Bajé las escaleras en un segundo, usando mi velocidad vampírica. De inmediato lamenté la elección cuando mi costado y mi pierna protestaron ante el movimiento. Me senté en el sofá con un suspiro y esperé a que el dolor disminuyera. NECESITABA cazar, o esto empeoraría. Encontré el control remoto y encendí la TV, sin prestarle atención. ¿Y si voy a buscar a Bella? ¿Y si ella estaba…? Suspiré de nuevo. Tenía que controlar mi ansiedad; nada malo le pasaría en La Push… supongo.

‘Justo cuando creí que lo tenía todo… debí haber puesto ese documento en mi auto’

¿La mente de Charlie? ¿No debería estar en la estación? Oh, bueno… espero que no trate de obligarme a comer de nuevo. Aún conservaba la horrible memoria del sabor en mi boca, y las desagradables consecuencias –tuve que ‘vomitarlo’-. Por supuesto, Charlie entro en la casa momentos después. Caminó directamente hacia el teléfono y comenzó a hablar con uno de sus oficiales. Aparentemente había olvidado un documento importante aquí y necesitaba saber exactamente cual era, así que el otro hombre le pidió que esperara aquí un momento; llamaría en un minuto para decírselo.

‘Grandioso’ pensó Charlie. Finalmente se dio cuenta de mi presencia y avanzó hacia el sofá. Agradecí mentalmente a todos los dioses existentes por haber tenido la buena idea de limpiar toda la sangre de mi ropa horas antes… eso hubiera sido imposible de explicar. Se acercó a mí, claramente incómodo.

“Buenas tardes, Charlie” dije.

‘¡Genial! Está aquí, ¿ahora qué? No puedo ignorarlo ahora… tranquilo… piensa en Bella… piensa en Bella…’

Tuve que fingir un ataque de tos para ocultar mi risa. Realmente era difícil para Charlie ser más amable conmigo –de nuevo, no lo culpaba por ello- pero me sentí conmovido. Estaba dispuesto a intentarlo sólo para hacer feliz a Bella, lo que me hacía feliz a mí también. Se sentó a mi lado, lo más lejos que permitía el sofá.

“Deberías estar en cama” dijo él.

“Estaba aburrido” respondí. Después de todo, era cierto.

“No luces muy bien… ¿te sientes bien?” preguntó. Si. Bueno, aparte de haber sido atacado por un hombre lobo y tener dos heridas que duelen horriblemente y, ¡oh, si! Estar terriblemente sediento –de sangre- pues si, estoy bien.’ Pensé con sarcasmo, pero no pude evitar sentirme agradecido; realmente estaba preocupado por mí.

“Si. No se preocupe, Charlie, estaré bien” respondí. Reí –tosí- de nuevo; la siguiente pregunta de Charlie era una buena.

“¿Ya llamaste a tu padre? Estoy seguro de que estaría muy preocupado si supiera que estás enfermo” dijo Charlie. Si, estaría muy preocupado si supiera. Esme seguramente se pondría frenética de preocupación… por eso aún no los había llamado. Bueno, por eso y por el peligro del cazador.

“No. No es nada serio, de verdad. No quiero preocupar a mi familia” dije. De nuevo, era la verdad… más o menos.

‘El chico no es tan malo, después de todo. Trata de no preocupar a su familia… pero de verdad se ve mal. Me pregunto si sólo es un resfriado’ Pensó Charlie. No me extrañó; considerando que había perdido la sangre que había consumido –gracias a ese lobo- estaba prácticamente muerto de hambre. Las ojeras bajo mis ojos eran más oscuras, y mi piel más pálida; seguramente lo había notado.

Vi lo que planeaba hacer en su mente, pero no pude impedirlo. Lo consideraría descortés, o comenzaría a sospechar. Tocó mi frente con su mano, para revisar si tenía fiebre. La reacción fue inmediata; rápidamente apartó su mano de mi piel helada. Dejé de respirar, esperando que su mente revelara que tan malo era.

¡Dios mío! ¡Está tan frío! ¿Qué ha estado haciendo? ¿Jugando con hielo? Con razón está tan pálido… ¡definitivamente, eso NO es un simple resfriado! Debería ver a un doctor, quizás pueda llamar a alguien…’

Me sentí aliviado. Al menos había atribuido la frialdad de mi piel a mi ‘enfermedad’. Pero eso solo significaba más problemas: ¿qué haría si decidía llamar a un doctor? Hay muchas cosas que dicho hombre encontraría anormales… era hora de la retirada, antes de que fuera demasiado tarde. Me levanté lentamente, tratando de ocultar el dolor que sentía, mientras Charlie me observaba con atención. Ni siquiera trató de ocultar su preocupación.

“Quizás tenga razón. Debería estar recostado” dije, y caminé con rapidez hacia las escaleras. Otro error. En mi intento por escapar del análisis de Charlie, me había movido más rápido de lo normal, más rápido de lo que mi pierna permitía por el momento. Esta vez, el dolor fue demasiado, y sujeté el barandal de las escaleras para apoyarme, apretándolo con más fuerza de la que debía… tronó un poco. Charlie escuchó el sonido y se levantó para verme, apoyado ahí con una expresión de dolor.

‘Definitivamente necesita un doctor… ni siquiera había notado que siente dolor. ¿Y porque se sostiene del barandal? ¿Se siente demasiado débil para caminar? Si, en definitiva voy a llamar a un doctor. Lástima que su padre no esté aquí…’

Eso era todo. Mi perdición. En mi intento de escapar, había empeorado las cosas… ¿Quién lo hubiera dicho? Charlie se acercó con el brazo extendido, obviamente para intentar ayudarme; pero no podía permitir que me tocara de nuevo, no podía cometer otro error fatal.

“¿Papá? ¿Qué sucede?” La voz de Bella me salvó. Supongo que tenía más suerte de la que creía.

“¡Bella! Nada, olvidé algo y encontré a Edward aquí… iba a ayudarlo a subir las escaleras; parece que no se siente muy bien” respondió Charlie. ‘Eso es… piensa en Bella… ser más amable con él no fue tan difícil como pensaba… quizás he sido muy duro con él’ Era difícil evitar el contacto con él cuando su mente decía esas cosas. Me sentiría mal si lastimara sus sentimientos recientemente descubiertos.

Bella me miró, preocupada. A diferencia de su padre, ella sabía exactamente lo que sucedía conmigo. Sonó el teléfono; otro golpe de suerte.

“No te preocupes, papá. Yo lo ayudaré” dijo ella. Gracias a Dios por eso. Bella sujetó mi brazo y fingió ayudarme con las escaleras. Charlie estaba al teléfono, aliviado de librarse de la tarea.

Cuando estuvimos en su habitación, Bella trató de obligarme a recostarme. Simplemente me senté en la cama. Cuando ella hizo lo mismo, tomé su rostro cuidadosamente con mis frías manos y la besé. Era agradable tenerla de vuelta, aún cuando se hubiera ido solo por unas horas. Mi olfato se llenó con su dulce fragancia, y la sensación de su boca suave y cálida contra la mía era ciertamente algo increíble. Si creía que ella era la única que se sentía mareada después de un beso, estaba equivocada. Me detuve después de un momento, cuando mi garganta comenzó a arder. Ella me miró, obviamente tan encantada como yo.

“¿Cómo te fue?” le pregunté con suavidad mientras besaba su cuello. Si de todos modos estaba sediento, ¿Por qué no disfrutarlo?

“Hum… bien…” murmuró ella con voz temblorosa. Reí, pero me detuve; tenía curiosidad.

“Bueno, dime” le dije. Ella hizo un gesto; obviamente no deseaba que yo me detuviera. Después sonrió de forma sospechosa… y me sentí frustrado; quería saber lo que estaba pensando.

“Te lo diré si me besas de nuevo” dijo ella. Bueno, ese era un precio que podía pagar… con placer.

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CONTINUARA.....COMENTEN PLEASE!