AYER ENCONTRE ESTE GENIAL FIC Y ME RECORDE DE Q YA LO HABIA LEIDO ANTES Y PENSE EN SUBIRLO DE INMMEDIATO...OVIAMENTE ACLARO Q YO NO LO ESCRIBI Y LA GENIA QUE MERECE LOS MERITOS SE LLAMA :
" Asuka Ishida "
ELLA ES LA GENIA QUE MERECE LOS MERITOS ..NO YO..BUENO ESPERO Q LES GUSTE...Y AMEN LA HISTORIA COMO YO..PORQ ME ENCANTOOO !!!LES ENCANTARAA MUAJAJJAJ..
AQUI LES DEJO EL PRIMER CAPITULO..SIN ANTES RECORDARLES QUE SUBIRE LOS OTROS FICS QUE HABIA DICHO..YO CUMPLO CON LO QUE DIGO...ASI Q NO PIENSEN QUE LO OLVIDE...OK??
XD :)
CAP. 2 ....:
.Paranoia.
Tomé una ducha rápida, preguntándome de donde salió esta actitud ¿Desde cuando puedo enfadarme con Edward? Técnicamente, me enfadé a causa de él. No por el. Algo que me inquieta mas es el hecho de cómo lo traté.
“Genial Bella, ahora te excusas por defender tu dignidad”.- una voz alterna me dijo.
Sacudí la cabeza, sintiendo como el agua se escurría por mis orejas. Soy una tonta. Amo a Edward, he dejado todo por el y lo seguiré haciendo.
“¿Y el hace lo mismo por ti?” – La misma voz me reclamó.
Claro que lo ha hecho. No le importó la posibilidad de que sus hermanos lo odiaran por contarme la verdad, sin contar con que si el no me hubiera salvado una docena de veces, en este momento estaría cinco metros bajo tierra alimentando a los gusanos del Cementerio de Forks.
Y lo mas importante, se enamoró de una humana. Conmigo, y no le importó. Lo hizo por que realmente me ama.
“Aprovechó la ocasión para deshacerse de tu cacharro y se tomó la libertad de comprarte uno nuevo. Decidió qué universidad es la que mas te conviene y por ultimo…te alejó de tu mejor amigo”-
Pero lo hizo por mi bien. Jacob es un hombre lobo y cuando Edward me transforme no podré acercarme a el…si es que algún día reaparece.
“Y si es que algún día te transforma…piénsalo bien Bella. Han pasado casi tres meses ¿Qué lo detiene?” – Mi subconsciente tiene un punto a su favor.
“Ya no le quedan excusas. Probablemente se dio cuenta que eres poco para el y quiere estar con alguien como…” –
Tanya.
Me congeló ese pensamiento.
Cerré el grifo del agua. Tomé rápido una toalla y me sequé frenéticamente.
Tal vez no fue buena idea el baño. Ahora me siento mas molesta que antes. Pensar en todo lo que he dejado por Edward, lo que he entregado…incluyéndome en el paquete y el me ignora por Tanya.
O quizá como necesita demasiada imaginación para inventar razones por las cuales no puede transformarme, entonces evita verme y prefiere estar con Tanya. Cómodo y sin preocupaciones.
Si ese es el caso, entonces YO también estaré COMODA y sin PREOCUPACIONES.
Decidida me arrollé la toalla en el cuerpo y salí a la habitación. Como lo supuse, Edward desapareció.
Fui directo a mi armario decidia a cambiar. A cambiar por mí.
Tomé unos pantalones entubados de efecto entubado que se amoldaron en mí del modo que quería. Una blusa color aguamarina tipo corsé y un saco blanco con mangas que me llegaban al antebrazo. Por ultimo, unos zapatos de tacón que por supuesto, se lucen gracias al pantalón.
Me arreglé el cabello, dejándolo caer en cascada sobre mi espalda y me puse algo de maquillaje.
Bajé a la cocina. No había desayunado nada, y pensar en comida solo me revolvió el estomago, así que…bueno, pensé en algo simple. Abrí el refrigerador y saqué la jarra de jugo de naranja.
Me dirigí al mueble de cristal donde los vasos se guardan.
- Bella ¿Eres tu? – una voz terriblemente conocida preguntó.
Volteé y ahí estaba. Mi dios griego de pie junto al marco de la puerta. Viéndose tan deslumbrante como de costumbre, con una sonrisa torcida y los ojos negros de… ¿lujuria?
- No – hice una mueca sarcástica – esto que vez es un holograma – completé.
“Soy Tanya, disfrazada de Isabella. Ahora puedes hacer lo que quieras conmigo y nadie sospechará” – Qué graciosa se está volviendo mi consciencia.
Abrió los ojos desmesuradamente. Apuesto que no vio venir el comentario.
Le di la espalda y tomé el vaso para verter el juego en él. Bebí de inmediato, quería salir rápido de la casa. Respirar aire fresco y mentalizarme.
- Bella – Edward pronunció.
Si. Quizá un día de acciones sin sentido alguno (o sea, salir de compras) sería benéfico para mi salud mental.
- Bella! – me sacó de mis pensamientos - ¿Por qué me ignoras?
- ¡¿Ignorarte?! – Alterada pregunté, perdiendo la paciencia – Edward, llevo poco mas de un mes esperando a que me prestaras un algo de atención…¿Y tu dices que te ignoro?
Su expresión se suavizo y una sonrisa cansada apareció.
- Mi amor – me dijo como si las palabras fueran reales. Comenzaba a dudarlo – Entiende. Tanya tiene muchos problemas…es mi amiga, mi deber es ayudarla.
La gota que derramó el vaso.
- Jacob es mi amigo también – le miré resentida – . –remarqué palabra a palabra.
- Te estas desviando por la tangente – dijo moviendo la cabeza – el es…
- Sé exactamente lo que es! – le grité. Sólo eso faltaba. – no soy una niña.
- Bella, Tanya es solo una amiga -
- No lo parece ni a golpes, Edward – respondí y tiré el vaso contra el lavabo. La fuerza fue demasiada y se eclipsó contra el metal, haciendo que se rompiera en mil pedazos.
Pasaron unos minutos y ninguno de los dos dijo nada. Yo estaba enojada, mirando el suelo de mármol.
- Esta celosa – pareció más afirmación que pregunta.
Alcé la vista, con los ojos entrecerrados.
No tuve tiempo de reaccionar. Estaba ahora contra su pecho de piedra, amoldándome a él.
- Oh, Bella – su voz dulce me dijo - ¿Por qué no me dijiste? Sabes que me hubiera negado a salir con Tanya.
- No te voy a dar a escoger –aspeté indignada, separándome de él y observé su rostro. Me miraba como si hubiera dicho algo prohibido.
Era la verdad.
El me dio a escoger entre él y Jacob. Dos cariños completamente diferentes.
Amor de pareja y amor de hermanos.
El resultado fue predecible, y aún teniendo que escoger de nuevo, volvería a escoger a Edward millones de veces mas.
Me di la vuelta. Un dolor en el pecho me invadió al escuchar sus pasos a pocos centímetros de los míos.
- Bella, justo iba por ti – dijo Alice cuando la encontré en el recibidor, a pocos metros de la puerta principal.
- Vámonos – apuré y la tomé del brazo, halándola con insistencia.
Llegamos al garage y Alice se subió en el asiento del copiloto de la Hummer H2 de Jasper. Y para mi sorpresa, éste estaba al volante. Atrás distinguí la rubia cabellera de í la puerta trasera derecha.
- Bella – dijo Edward detrás de mi, como si de un respiro se tratase su voz. – Bella, escúchame…
Y eso fue lo último que escuché, por que cerré la puerta casi en sus narices.
- Listo – Jasper dijo con voz sombría -
El auto comenzó a irse en reversa, saliendo del enorme garage. Justo enfrente de nosotros, Edward en el mismo lugar donde justo hace unos segundos le cerré la puerta, con el rostro desencajado.
Definitivamente, será un largo día.
COMENETEN -..LES ASEGURO Q ESTE FIC LES VA A ENCANTAR !!!!!!
sábado, 17 de octubre de 2009
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jkajkaq paranoica bella xd ponerse celosa de tanya esta bueno el fic espero el prox capii okis adiosss
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